#F03. Juicio Final: La Vida, en sí misma, va a juicio
(Un Juicio Contra el Hombre)

El Juicio Final se refiere al pronunciamiento de la primera ley del juicio contra cualquier especie y sus subespecies relacionadas; mientras este Juicio Final es finalmente el mismo para todas las especies, en nuestro caso, es la versión del Juicio que aplica a nuestra rama de La Familia Del Hombre ( Fig. # 5), La EspecieGemela: El Humano, que está compuesta de dos subespecies: la Subespecie Varón y la Subespecie Hembra (Fig. #4). [Es importante notar que cuando estamos haciendo referencia a varón o hembra, no estamos haciendo referencia al ropaje externo del individuo. Estamos haciendo referencia a la naturaleza interior que conduce el punto-de-vista del individuo, el sistema de valores del individuo y las preferencias del individuo. El ropaje externo del individuo es simplemente una parte secundaria de lo físico]. Debe recordarse que cósmicamente, debido a que estamos en el nivel de un Universo, de la Corriente Conductora Real (Fig. #6) (la ley en cuestión es Real para el Universo del carbono), el juicio del que nosotros hablamos es, cuando todo esté dicho y hecho, absolutamente final--no hay recurso alguno a considerar. Cuando este juicio venga, la EspecieGemela: El Humano [y sus dos subespecies] ya no existirá--el Hombre se extinguirá. El juicio final contra el Hombre establece: 

Cuando el juicio final venga, vendrá contra el Hombre, la especie, no contra el Hombre, el individuo. 

Así, cada hombre y cada mujer están unidos a la EspecieGemela: El Humano, como un todo, independientemente de la ilusión de separación hacia la individualidad. De hecho, cada uno es el protector de su hermano(a). Mientras el Hombre fue, originalmente, y aún es, unitario en su naturaleza, así también, el Karma juzga al Hombre como una sola creación--esa sola creación se llama Amulious [pronunciado en Inglés como Un-mu-el lis]. Resumimos esto diciendo: ¡Nosotros Somos Uno! 

Una implicación de la ley: Nosotros somos uno, es que hay sólo una energía de FuerzaMente que anima todas las formas de vida. Entonces, el patrón se repite en sí mismo en todos los niveles más altos y más bajos. Mientras la energía de la FuerzaVida puede ser diferente, dependiendo del punto específico a lo largo del continuum de las formas de vida, la energía de la FuerzaMente es la misma, sin tener en cuenta el nivel en cuestión--sólo los límites varían de subespecie en subespecie. 

Mientras cada hombre [la subespecie Varón] y cada mujer [la subespecie Hembra] se unen uno a otro [porque los dos pertenecen a la misma EspecieGemela: El Humano], el Hombre--la EspecieGemela: El Humano--se une a todas las otras formas de vida. Su administración de cada una y todas las formas de vida, por el poder de la Ley De El Momento, es la misma semilla de su propio juicio. Y, cuando el juicio absoluto contra el Hombre venga, El Juicio Final vendrá contra la especie, no contra una subespecie. 

Sin embargo, ése no es el fin de El Juicio, en la medida en que aún hay un juicio contra la vida, en sí misma--el juicio de la FuerzaMente y no simplemente contra la vida, la especie individual. Recordad, una especie puede extinguirse mientras la vida continúa. 

Puede ser difícil para muchos aceptar que la especie Hombre está realmente compuesta de dos subespecies--una consiste en todos los varones de la especie humana, mientras que la otra consiste en todas las hembras. Es porque ellos están unidos en un lazo inquebrantable [cada uno debe existir y debe coexistir, durante un tiempo, así como el otro, para que cada uno se reproduzca] puesto que cada uno sirve como el final opuesto del continuum de la sexualidad (vea las Fig. #1 & Fig. #2). 

La subespecie Varón, sirviendo como el fin activo del continuum de la sexualidad, se enfoca básicamente en todos sus patrones de pensamiento. Sus urgencias parecen, en su mayor parte, estar sólo enfocadas en una mancha de su parte física--su 4o Chacra áurico, las leyes que gobiernan el proceso de nacimiento/muerte (Fig. #3). Debido a la consistente, aparentemente inacabable, orientación a reproducirse, debido a que la intensidad de la orientación causa que el Varón de la subespecie busque su co-subespecie Hembra, las leyes de la creación, de su propia manera, continúan la existencia de la EspecieGemela: El Humano; y, por las leyes de los patrones repetidos, la continuidad de la existencia de La Familia Del Hombre. 

Sin embargo, hay más que separa las dos subespecies que simplemente el continuum sexual. Igualmente, hay más de una diferencia física entre las dos subespecies que las partes obvias del componente sexual. Con una poca investigación científica, se descubrirá que la anatomía física básica es totalmente diferente, aunque el patrón entre las dos es el mismo, sólo las especificidades son diferentes. 

Por ejemplo, mientras el varón es normalmente grande, la hembra es normalmente pequeña; mientras el varón totalmente desarrollado tiende a un cuerpo físico plano, en forma de T (en donde los hombros parece ser la parte más ancha), la hembra tiende a un cuerpo físico mucho más en forma de curva (en donde las curvas más grandes se encuentran en el pecho [el busto] y en las caderas [debido a las necesidades de la maternidad]); mientras el cerebro del varón es el más grande de los dos, y, mientras el cerebro de la hembra es el más pequeño de los dos, salvo diferencias menores, el patrón es el mismo, y por eso, los límites de las posibilidades son iguales, dadas sus naturalezas básicas [los varones nunca sabrán lo que es ser una hembra, y lo contrario también es cierto, independientemente de los cambios inducidos quirúrgicamente]; mientras el varón normalmente tiende hacia la autosuficiencia, la hembra tiende a necesitar más a otros; mientras el varón tiende a encontrar su auto-imagen en la cual él puede lograr su independencia, la hembra tiende a encontrar su auto-imagen en relación con una atención significante-de-otro; mientras un varón consigue su sentido de seguridad mediante su propio logro, una hembra tiende a conseguir su auto-imagen por lo que ella piensa que otros piensan de ella (sobre todo su compañero escogido); mientras un varón tiende a ser más rígido en su concepto de masculinidad, una hembra tiende más a poder compartir el contacto físico con otras hembras sin dañar su imagen de lo que una hembra debe ser; y, por último pero no por ello menos importante, cuando la subespecie: Varón satisface su necesidad por aparearse, éste normalmente es un proceso fisiológico que a veces conlleva a ilusiones de lazos (la longitud del tiempo que continúa la ilusión del lazo depende del vínculo específico que está teniendo lugar con la compañera. El vinculo puede durar una vida o se puede acabar tan rápidamente como el beso que ocurrió durante el clímax).  

La subespecie: Hembra, sirviendo como el otro extremo del continuum de la sexualidad, es básicamente difusa en sus patrones de pensamiento. Sus urgencias parecen quedar en más de un lugar en lo físico en un momento dado (durante las fases diferentes de los rituales la unión sexual, las áreas sensibles pueden difundirse entre la cabeza, las mejillas, los labios, la lengua, las orejas, la parte de atrás del cuello, el área bajo la barbilla, la parte de atrás de los hombros, los pechos, el abdomen, la vagina, y entre los muslos). Este proceso de difundirse impone muchas limitaciones que a veces son frustrantes. 

Ejemplos de las limitaciones impuestas que a veces pueden ser semilla para la frustración, podrían ser: mientras el patrón de pensamiento de una hembra es tan difuso como sus emociones, el patrón de pensamiento del varón es enfocado; mientras durante una conversación, una hembra parecerá saltar de tema en tema sin una aparente conexión entre éstos, la conversación de un varón tiende a seguir una sola línea de pensamiento desde el principio hasta el final; mientras las emociones de una hembra normalmente tienen un efecto retardado (haciendo que la hembra se ponga aparentemente enfadada sin causa), el varón tenderá a enfadarse casi inmediatamente después de que algo le desagrada, de tal manera que la conexión real entre su arranque emocional y la causa puede verse de inmediato; y, último, pero no menos importante, mientras el rezago emocional de la hembra a menudo causa que el arranque emocional sea aparentemente lento, el arranque emocional del varón tiende a ser más inmediato--si el enojo no se presenta inmediatamente, el tiempo tiende a no sacar el enojo. 

Los Sabios antiguos tenían una manera muy especial de enseñar a los jóvenes estudiantes buscadores, la importancia de la actitud de Unidad. Mientras ellos procuraban enseñar las necesidades de la unión de las dos subespecies, no obstante encontraron que las diferencias eran un escenario importante para aprender sobre los errores del prejuicio. Ellos contaban un relato en donde el Dios--Anubis (el buscador del fin de toda ilusión), estaba comentando (estaba hablando con la Diosa Isis, la dadora de todas las ilusiones) sobre el juicio final contra la especie Hombre y sus subespecies relativas, el Varón y la Hembra, debido a su mala administración de la Tierra Media Baja. En el relato, El Dios--Anubis--estaba contemplando la acción contra los fracasos de la especie hombre. 

Juicio Contra el Hombre, La Especie

"¡He aquí, hermana! ¡Nosotros somos de una sola faz! Vuestro regalo al hombre no es generoso. Ellos son menos que verdaderos con sus Ilusiones. El miedo empuja al hombre hacia su trampa. El miedo es el azote más grande del hombre. El Tiempo es el enemigo del Hombre. El individuo teme a todo lo que tiene que ver consigo mismo. 

"El hombre teme a los mismos elementos que crearon su naturaleza, luego él culpa de los actos de los elementos a los Dioses de su propia creación. 

"El hombre teme a su propio dolor, luego él culpa a su hermano de los crímenes que plagan su mundo. 

"El hombre teme al abandono de su propia soledad, luego él culpa a otros de su propia falta de personalidad. 

"El hombre teme al juicio del tiempo, luego él se coloca a sí mismo como juez sobre otros de su tipo, condenando a su hermano por actos, que él mismo ha cometido. 

"El hombre teme a la verdad, luego él corrompe la faz del juicio haciendo que la verdad luzca como falsa y la falsedad luzca como justa, luego él culpa del acto al lenguaje.

"El hombre teme a la fuerza de otros, luego él enfrenta a otros contra esa fuerza usando mentiras de omisión y lo indirectamente tácito, así que, él culpa de la pestilencia de su propio acto a los prejuicios de otros.

"El hombre teme al futuro, luego él trata de destruirlo corrompiendo su propia semilla, usando como armas el amor a la semilla, el amor a la humanidad y el amor a Dios. 

"En verdad, en verdad, yo digo sobre el hombre, el juicio final no colocará al hombre contra el Escriba Dorado! ¡Será el mismo Escriba Dorado--Ptoh, quien marcará la cuenta contra cada uno por sus crímenes! ¡El hombre no enfrentará el juicio final como individuo! Porque, está escrito, el juicio final marcará la cuenta contra el hombre--La Especie. 

"Hombre, mirad vos, por lo tanto, largo y profundamente en el cuidado de vuestro Ka. Si un hombre busca salvación, permitidle mirar en el pasado para encontrar el futuro!

"¡En Verdad, en verdad,  si un solo individuo es condenado por el deseo de un hombre, entonces, también, es condenada la especie entera! ¡Porque está escrito, solo hay un camino! ¡Lo que sea cometido contra el último de los hombres, será cometido contra la mayoría de los hombres! ¡De acuerdo al Escriba Dorado, lo que se desate en La Ilusión será también desatado en la Realidad de cada uno!

"¡He aquí, Hermana! ¡Nosotros somos de una sola faz! Mi faz vendrá. ¡Mi faz vendrá!".